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Basquetbol • 25 enero 2019

Es la hora de jugar

Se reanuda el Torneo Federal de básquet y Estudiantes comienza el año como visitante. Desde las 21.30 enfrenta por la décimo tercera fecha de la zona metropolitana a Estudiantil Porteño. La pretemporada fue muy exigente para un plantel que sueña con salir del fondo de la tabla

Luego de un poco más de un mes, y con pretemporada en el medio, se acabaron las vacaciones para el básquet de Estudiantes. Hoy vuelve la competencia oficial del Torneo Federal. Este retorno será de visitante. Por la décimo tercera fecha de la zona metropolitana el quinteto pincha visita a Estudiantil Porteño.

Estudiantes sabe que se inicia una etapa clave, determinante para sus aspiraciones de conservar la categoría y a partir de que se cumpla este objetivo aspirar a algo más. Hoy el debut 2019 será fuera de casa. Estudiantil Porteño es el primer obstáculo a superar por los pupilos de Mauricio López. Los de Ramos Mejía son un rival directo en esta lucha por salir de la zona roja de la tabla de posiciones.

Con casi un mes de descanso y pretemporada, el plantel se entrenó de manera muy exigente en el Country Club y en partes en el gimnasio de club Atenas (aún el Polideportivo de City Bell no está en condiciones para ser utilizado), y con la particularidad que desde el primer día de entrenamiento la plantilla recuperó a Juan Pablo Sartorelli, aunque perdió el base Mateo Boccantoda. Además la dirigencia sumó al juvenil Franco Zanassi, hijo de Leo Zanassi, ex jugador pincha.

Con Sartorelli, Estudiantes no sólo tendrá experiencia en la zona perimetral, sino que a la vez puede ser una gran rueda de auxilio para los internos: Vallejos y Castro. Precisamente ambos pivots hoy tendrán la misión de lidiar con el juego interior de Porteño y que ellos, es decir ambos jugadores albirrojos, sean claves en las ofensivas para que no pase todo por los tiros de media distancia.

Estudiantes apenas ganó dos partidos en la primera parte de la temporada y necesita de éxitos para, primero salir de los puestos de abajo, y segundo para tomar esa confianza que siempre necesita un equipo a la hora de afrontar duelos cruciales como el de esta noche en Ramos Mejía; y también para creer en todo lo bueno que se hizo en la recta final del 2018 pero donde la dicha le jugó una mala pasada.

 

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